EL SAPO Y LAS MINAS DE MERCURIO
Texto y fotografías: Eugenia Galeano Inclán
Mayo 2018
Los mexicanos tenemos la suerte de tener un país multicultural, de muchos colores y paisajes hermosísimos. Nuestras playas son admiradas por nacionales y extranjeros, pero también hay desiertos, montañas, volcanes, bosques, la vegetación es abundante, en varios sitios crece en forma salvaje y no por ello es menos llamativa. Existen numerosos pueblos mágicos y rincones insospechados. Visitarlos todos es casi imposible. Así mismo, nuestros ancestros nos legaron edificaciones espectaculares que han sido estudiadas por miles de arqueólogos de todo el mundo. El arte también tiene un lugar relevante. No sólo podemos presumir de la obra de grandes pintores, muralistas, escultores, arquitectos, sino que hasta en los poblados más apartados encontramos artesanías bellas y originales. Al igual que no podríamos abarcar el territorio entero, tampoco sería posible leer todo lo que han escrito nuestros insignes autores o poetas, ni conocemos todos los hechos históricos de nuestra nación. Los libros de historia destinados a las escuelas sólo consignan aquello que alguien consideró lo más importante y hay tal cantidad en las bibliotecas que no sabemos cómo elegirlos.
Martín López Brie encontró una parte de nuestra historia que es muy poco conocida. Supo que durante un tiempo hubo una red de espionaje nazi. Le sorprendió tanto saberlo que llevó a cabo una investigación exhaustiva de la cual sacó un estudio muy completo, fundamentado con documentos, confesiones oficiales y literatura. Martín López Brie nació en Buenos Aires, Argentina, pero reside en México desde hace mucho tiempo, es egresado de la licenciatura en historia en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México -UNAM-. Su formación como dramaturgo la obtuvo a través de talleres impartidos por prestigiados autores mexicanos y extranjeros. Se ha desempeñado como dramaturgo, vestuarista, iluminador y director de escena. Entre los reconocimientos y premios a que se ha hecho acreedor, podemos mencionar: Premio Nacional de Dramaturgia Gerardo Mancebo del Castillo Trejo 2005 por "Orfico Blues", Premio Nacional de Dramaturgia Manuel Herrera Castañeda 2007 por "El crimen del Hotel Palacio", y Premio Bellas Artes Baja California de Dramaturgia 2016 por EL SAPO Y LAS MINAS DE MERCURIO y es precisamente esta última la que contiene su relato sobre el espionaje nazi.
Ante tanta información recabada, Martín López Brie decidió convertirla en dramaturgia, su primer reto a vencer fue hacer una síntesis, prueba que superó en forma extraordinaria mediante una estructura excepcional. A fin de no hacerla sólo informativa, creó una historia de varios personajes, donde sólo son tres los protagonistas, para darle calor humano la revistió de triángulo amoroso y para hacerla amena la enmarcó en un formato de historieta o, como se le dice coloquialmente "comic". EL SAPO Y LAS MINAS DE MERCURIO capta el interés del espectador de principio a fin, las características de los personajes están delineadas en forma clara y firme, las referencias históricas se van develando de poco a poco. La trama versa sobre la red de espionaje nazi vinculada con el tráfico de recursos naturales y la explotación de minas clandestinas, básicamente de mercurio --de ahí el título--. Estaban involucrados en dicha explotación altos mandos de las fuerzas armadas y Secretarios de Estado del país, así como celebridades de Hollywood y magnates internacionales. Este suceso se dio en los tiempos en que estaba en auge en México el sinarquismo, movimiento político, social y cultural nacionalista mexicano fundado en 1937 en León, Guanajuato por un grupo de jóvenes activistas nacionalistas y católicos inspirados en los movimientos de tercera posición en Europa, en particular, por el falangismo español.
José Ortiz Muñoz, apodado "El sapo" es un matón a sueldo. Fue contratado para eliminar a unos sinarquistas. El sapo suele decir "mato por gusto y mato por encargo", así que todo aquel que le estorbe, deberá cuidarse. Dolores Toral es una joven enigmática, aparentemente recatada, muy inteligente y trabajadora que sabe cómo conseguir beneficios. Patrick Brice, por su parte, es dibujante. Su trabajo consiste en hacer retratos hablados, pero su anhelo es triunfar con una historieta. De hecho, ya tiene una terminada, la intituló "El Culebra", lo que le falta es dinero, así que necesita de un editor o de alguien que le brinde patrocinio. El sapo llega un día a la jefatura de policía y pide que el señor Brice le haga un retrato hablado. La imagen que surge en el papel es el rostro de Dolores. ¿Para qué quiere ese retrato El sapo?
Más tarde, Brice conoce a Dolores y se siente atraído por ella, juntos planean desenmarañar misterios y toman un tren. Lo que no saben, es que El sapo viaja en el mismo transporte. Los tres habrán de correr aventuras y peligros en el trayecto.
Martín López Brie asume la dirección de su propio texto y ofrece un trabajo impecable. Su trazo escénico sustenta el concepto integral, excelente balance entre acción y pausas, buen aprovechamiento del espacio, coreografía variada, sincronización exacta de imágenes multimedia, la cual sorprendentemente es manejada por el propio elenco, ritmo preciso.
Otro acierto es el elenco. Los tres integrantes ofrecen un trabajo espléndido en lo histriónico, lo corporal, lo expresivo y lo vocal. Cada uno de ellos dota a su respectivo personaje de una amplia gama de emociones. Sofía Beatriz López da vida a Dolores Toral o Lolita, mujer perspicaz que utiliza sus encantos para sus propios fines, Ángel Luna es el soñador dibujante Patrick Brice, en tanto que el polifacético Alejandro Morales encarna a El Sapo, un terrible, pero carismático sanguinario.
La escenografía e iluminación fueron diseñados por Fabiola Hidalgo, quien captó la esencia y desarrolló un entorno estético e idóneo para el relato. El diseño de vestuario es de Indira Aragón, quien retrató fielmente el estilo usado en esa época tanto para los caballeros como para la dama. La edición musical es por parte de Mike Brie con un atinado diseño sonoro que coadyuva con la acción.
La producción ejecutiva es de Adriana Ruíz, la asistente general es Silvia Abogado, el diseño gráfico es de Diego Guadarrama, el Community Manager es Eduardo Noguera y la fotografía es de Marco Lara.
La producción es de la Cía. Teatro de Quimeras, presentado por el Sistema de Teatros, a través de la Coordinación del Sistema de Teatros de la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Ciudad de México.
El proyecto fue producido con el apoyo del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes -FONCA- para Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales.
Conoce un poco más de la historia de México y entérate cómo funcionaba la red de espionaje nazi. EL SAPO Y LAS MINAS DE MERCURIO es teatro de calidad, en un formato original. Acompaña a El Sapo, a Lolita y a Brice en sus correrías, mientras disfrutas de un interesante relato, montaje dinámico, excelente dirección y memorables actuaciones. Sólo que tienes que apurarte porque esta segunda temporada fue muy breve y está por concluir, sólo le quedan cuatro funciones.
EL SAPO Y LAS MINAS DE MERCURIO
se presenta jueves y viernes a las 20:00 horas,
TEATRO BENITO JUÁREZ
ubicado en Villalongín número 15, colonia Cuauhtémoc
--cerca de la Estación Reforma del Metrobús--, Ciudad de México.
El costo de la localidad es de $141.00, con descuentos acostumbrados para personas con credencial vigente.
La temporada concluye el domingo 6 de mayo de 2018.
0 comentarios:
Publicar un comentario